Redacción El Profesional del Siglo XXI

 

No te gusta tu trabajo; no te pagan correctamente; no sientes compromiso con la empresa; no tienes conciliación o perspectivas de futuro…

 

Vamos, que un posible cambio, si surge, está en ciernes.  

 

Antes de nada, analice su tiempo y programe el tiempo que le va a dedicar a buscar, en paralelo a sus demás quehaceres diarios.

 

Toca planificarse. El primer paso en la búsqueda de empleo es determinar lo que está buscando en un nuevo empleo. Las personas frecuentemente expresan el deseo de un nuevo puesto, pero no están seguros de lo que les gustaría desempeñar. Si una persona se encuentra en esta circunstancia, es casi seguro que necesitará realizar una combinación de investigación en la web y entrevistas informativas para descubrir más acerca de las perspectivas disponibles.

 

Cuando se trata de la investigación en Internet, tiene mucho margen de maniobra en términos del momento de búsqueda elegido. Puede elegir al final del día, después del trabajo cuando sabe que tendrá al menos una hora libre para dedicarla a investigar tendencias, investigar las habilidades necesarias y echar un vistazo rápido a la publicidad laboral.

 

Pero es muy importante que, si te lo tomas en serio, conseguir un nuevo trabajo y quieres relacionarte más, reserva tiempo cada semana para considerar con quién quieres contactar y comunicarte con ellos. Esto puede ser en la tarde o la mañana de un día laborable, o podría ser los fines de semana. Haga de este un evento recurrente en su calendario. Será como un trabajo paralelo.

 

Ya está clara la agenda, pues hay que organizarse. Es muy importante elegir un día y una hora precisos para comenzar a trabajar en sus cambios. Luego, hay que comprometerse con ese trabajo paralelo durante una o dos horas en el momento señalado. Cuando lleguemos al final de ese límite de tiempo, hay que planificar la siguiente sesión. Por lo general, es difícil lograr todos los cambios que desea en una sola sesión, pero si continuamos avanzando, lograremos avances.

 

La presión positiva de amistades profesionales puede ser muy útil. La motivación, en este camino, también es clave. Con frecuencia hay emociones de vulnerabilidad asociadas con exponerse, por lo que tener personas de apoyo alrededor que puedan echar una mano, retroalimentación y aliento puede ayudar.

 

El trabajo diario, es decir, explorar todos los días la oportunidad buscada, es clave para el éxito y una vez conseguido un pase para esa posible oportunidad, hay que aprovecharla… ahí viene la posible entrevista y el momento de demostrar quienes somos.

 

Esta puede ser la parte más difícil del proceso de organizar mientras buscamos un nuevo trabajo, dependiendo de la duración, la programación y la ubicación de sus entrevistas. Si operamos de forma remota o en un entorno híbrido y las entrevistas son virtuales, hay que programarlas para un día en el que estemos trabajando de forma remota. Si son breves, podemos usar la entrevista como su hora de almuerzo. Si son largas, es posible que debamos tomarnos un tiempo libre o trabajar temprano, tarde o los fines de semana para compensar.

 

Cuando toque entrevista, programar el día es fundamental. Requiere concentración y preparación, pero, sobre todo, evitar interferencias. Buscar un nuevo trabajo mientras se trabaja, es trabajar en dos cosas a la vez. Sin embargo, dedicar el tiempo y el esfuerzo necesarios, puede salir muy rentable en la carrera profesional. Escalar supone buscar oportunidades saliendo de nuestra zona de confort. Crecer es explorar nuevas vías no conocidas y dichas vías, hay que buscarlas. ¿Te lo has planteado?