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Empleabilidad del sector asegurador en España

 

En un país de servicios como España, dónde este sector representa casi el 75% del PIB, según datos oficiales del Instituto Nacional de Estadística (2021), es imprescindible hablar del sector asegurador. Los seguros aportan a la economía española un total de € 64.673 millones, lo que equivale al 5.4% del producto interior bruto. Si bien es cierto, España, aún se encuentra alejado de países como EEUU o UK con tasas del 11.43% y 10.30%, respectivamente, hay una clara tendencia alcista en este mercado, ya que luego de la pandemia COVID-19, las familias han comprendido la importancia de contar con un seguro de salud privado o planes de ahorro.

 

Diversos informes del sector apuntan que en España se emplean 650 000 personas entre trabajadores propios de las compañías de seguros, agentes exclusivos, corredores de seguros y prestadores de servicios, como mecánicos, fontaneros, médicos, peritos, entre otros. Este sector destaca por su estabilidad laboral, puesto que el 97% de los trabajadores cuenta con un contrato indefinido, haciendo frente al problema de la temporalidad en la población activa española, donde 1 de cada 4 asalariados tiene un contrato temporal. Asimismo, otro aliciente de trabajar en seguros es su atractiva retribución, esta actividad está entre las diez mejor pagadas, con un coste salarial mensual por trabajador de 3 964 euros, un 45% por encima de la media en España. Por otro lado, los profesionales de este sector cuentan con otros importantes beneficios como seguro de vida, descuentos en pólizas, formación continua, igualdad, conciliación y planes de carrera muy interesantes.

 

Con la entrada en vigor del nuevo R.D 287/2021, de 20 de abril, sobre formación y remisión de la información estadístico-contable de los distribuidores de seguros y reaseguros, es importante mencionar que esta actividad viene siendo muy regulada. La principal novedad en materia de formación es que la anterior clasificación que recogía la Ley 26/2006 de mediación de seguros: Grupos A, B y C desaparece y ahora se crea una nueva clasificación en niveles: Nivel 1, Nivel 2 y Nivel 3, siendo el más completo de ellos el Nivel 1. Por otro lado, aquellos profesionales interesados en asesorar en materia de planificación financiera, deben contar con el certificado MIFID II, directiva europea que pretende aumentar la transparencia e integridad de los mercados y reforzar la protección del inversor, sean minoristas, profesionales o contrapartes elegibles. Como resultado de esta regulación en materia de formación, las compañías de seguros invierten una media de 700 euros por trabajador, se estima que cada año se forma al 90% de la plantilla de las 199 compañías aseguradoras que hay actualmente en España. Ya lo decía Henry Ford: «Sólo hay algo peor que formar a tus empleados y que se vayan. No formarlos para que se queden».

  

Si bien es cierto se siguen contratando perfiles clásicos como actuarios, economistas, ingenieros, especialistas en marketing, entre otros, hay una fuerte demanda hacia profesionales tecnológicos como informáticos, expertos en ciberseguridad, analistas de big data . La digitalización del sector está generando un especial interés en estos especialistas para poder sacar el máximo provecho de tecnologías novedosas como la Inteligencia Artificial, Blockchain, Sandbox.

 

Álvaro De La Rocha Alonso profesional del sector banca y seguros con más de 10 años de experiencia trabajando en diferentes empresas de Europa y Sudamérica.

B.B.A por la UPC (Laureate Universities), MSc in Corporate Finance & Investment banking por el IEB, Global Business & Markets Programme por la LSE.

Es corredor de seguros Nivel 1 titulado e inscrito en la Dirección General de Seguros y Fondos de Pensiones. Asesor financiero según normativa europea MIFID II.